Luna azul

El paraíso 

Qué guarda tu corazón

qué balbucea nervioso y emocionado

en la antesala de un nuevo tiempo

del que no se puede escapar

ni se quiere porque es inevitable

que  acoja también el pasado

y se perdone si es necesario.

Dibujaste una idea poética

que nacía de unos torpes trazos

pero era clara e inherente a tu vida.

Yo,  a la vez que los ángeles dorados 

de mis puertas quería protegerte

y puse de mí misma, de mi piel

en cada uno de tus rincones.

No tengo quejas, viví en mi luna azul 

en el mejor de los lugares

y conocí a buenas personas

y a seres mágicos.