Érase una vez
Obra de la autora del blog
( acrílica sobre lienzo)
Érase una vez un lugar
que a fuerza de olvido se moría.
Belleza efímera,
como un soplo de la vida;
las piedras ya en ruinas
queriéndolo aún germinan
en los ojos de quienes miran.
Capillas donde nadie reza,
casas que nadie habita,
flores que no se riegan,
calles que no se limpian.
Érase una vez un lugar
que a fuerza de olvido se moría.
No hay nadie que lo reclame
en los despachos de los que dictan,
quedan los soñadores
viviendo su querer extraño,
haciéndose mayores,
hablando de la mina.
Érase un lugar en un valle
con su bosque, y su montaña,
con su río, con sus huertas,
con los recuerdos de la infancia,
donde todos sacan y se llevan,
donde nadie deja nada
sólo promesas mal hechas
y un vuelva usted mañana.
Comentarios
Un abrazo.
¿Cuántos recuerdos tendrás de este lugar y que sobreviven por momentos? ¿Es tu aldea?
Es como si quisieras mantenerlos vivos y cada vez se van quedando en la soledad del tiempo.
Un bello poema, tan personal como el propio lienzo.
Mucho tiempo sin comentarte, aunque te sigo en el blog. Un abrazo.
Abrazo.