Un recuerdo de invierno
Ontario, Canada, 1990, Foto de Larry Towell
Acabará el invierno y tendremos más de un instante al sol.
Creceremos, y veremos con los ojos de un niño los lugares
donde aguardábamos emocionados acontecimientos imaginarios.
La inocencia no nos la roba el tiempo sino la desilusión.
De vez en cuando nos pide el corazón un recuerdo,
el impulso para seguir caminando y no detenernos.
Hoy más que nunca siento la áspera y cálida corteza envolviéndome,
la suavidad de la piel de aquel gato de melancólico maullido
y mi voz de niño, entrecortada por el esfuerzo de haber subido
aquella alta torre, en un castillo que tocaba el cielo.
Acabará el invierno y tendremos más de un instante al sol.
Creceremos, y veremos con los ojos de un niño los lugares
donde aguardábamos emocionados acontecimientos imaginarios.
La inocencia no nos la roba el tiempo sino la desilusión.
De vez en cuando nos pide el corazón un recuerdo,
el impulso para seguir caminando y no detenernos.
Hoy más que nunca siento la áspera y cálida corteza envolviéndome,
la suavidad de la piel de aquel gato de melancólico maullido
y mi voz de niño, entrecortada por el esfuerzo de haber subido
aquella alta torre, en un castillo que tocaba el cielo.
Comentarios
Besos mamen.
Un beso.